El cambio al biometano puede reducir significativamente los costes operativos en más de un 30 % en comparación con el diésel, lo que lo convierte en una opción atractiva tanto para empresas como para particulares preocupados por su presupuesto. Además, el ahorro a largo plazo puede mejorar sustancialmente la sostenibilidad financiera.
El BioLNG es el combustible preferido por las empresas de transporte internacional y para largas distancias. Los camiones de BioLNG pueden recorrer más de 1500 km con un solo depósito, lo que los hace competitivos con el combustible diésel. Repostar camiones de LNG es tan rápido como repostar con diésel (menos de 10 minutos), lo que facilita operaciones eficientes y tiempos de espera mínimos.
El BioLNG puede lograr una reducción de hasta el 100 % de las emisiones de CO₂ e incluso puede tener emisiones negativas dependiendo de la materia prima utilizada (por ejemplo, estiércol), lo que lo convierte en una opción sostenible para el futuro. Los motores de gas reducen el ruido del motor en un 50 %. Esto se traduce en un funcionamiento más silencioso y una menor huella medioambiental.
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El LNG (gas natural licuado) y el bioLNG (biometano licuado) son químicamente exactamente el mismo producto; la única diferencia es su huella de carbono. El bioLNG puede lograr una reducción de CO₂ de hasta el 100% e incluso puede tener emisiones negativas en función de la materia prima utilizada (por ejemplo, estiércol), lo que lo convierte en una opción sostenible para el futuro. Los motores de gas reducen el ruido del motor en un 50%. El bioLNG se produce localmente a partir de residuos orgánicos o estiércol, lo que lo hace resistente frente a las crisis de precios derivadas de cualquier futura crisis energética mundial. También contribuye a independizar a Europa de las importaciones energéticas de gas natural.
Iveco, Scania y Volvo ofrecen camiones de LNG con distintas configuraciones y tamaños de motor. Los tres OEM tienen una visión estratégica a largo plazo de esta tecnología debido al bioLNG, que se considera un factor clave para lograr un transporte sin combustibles fósiles en 2040-2050. Los camiones de LNG son un 20% más caros que sus homólogos diésel. Sin embargo, el LNG como combustible de transporte es de media un 30% más barato que el gasóleo cuando se utiliza la tarjeta de combustible Eurowag, lo que supone un retorno de la inversión de aproximadamente dos años. Los precios pueden variar en función de la disponibilidad de bioLNG, que suele ser más caro pero puede disfrutar de reducciones fiscales.
La tarjeta de combustible Eurowag se acepta en más del 60% de todas las estaciones de servicio de LNG de Europa, lo que da acceso a más de 500 estaciones en total. Es posible encontrar LNG desde Helsinki (FI) hasta Sicilia (IT), lo que convierte al LNG en la alternativa más accesible al gasóleo. Los clientes de la tarjeta de combustible Eurowag también pueden acceder al CNG en más de 300 estaciones. La cuota de biometano crece constantemente y se ofrece en más del 30% de todas las estaciones de LNG de Europa; en el caso del CNG, la cuota de biometano es aún mayor. Eurowag explota dos estaciones de LNG en la República Checa y ofrece bioLNG a sus clientes, allanando el camino hacia un transporte comercial por carretera neutro en carbono.
Disponemos de diferentes combustibles alternativos, como bioCNG, bioLNG, HVO, LPG y electricidad. Consulte nuestra red de aceptación para ver las estaciones disponibles y compruebe cómo obtener una tarjeta de combustible Eurowag ahora.
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